Uno de los comentarios habituales que surgen a la hora de analizar la necesidad de incrementar la productividad española o de las exportaciones es el pequeño tamaño de la inmensa mayoría de nuestras empresas. Según los datos del primer semestre de 2017 del Directorio Central de Empresas (Dirce), del Instituto Nacional de Estadística, el 82,8% de las empresas españolas tiene dos o menos asalariados. Es decir, 2,7 de los 3,2 millones sociedades existentes. Es más, 1,8 millones de sociedades no tienen ningún trabajador, lo que supone el 55,5% de las empresas españolas.